La multinacional estadounidense, una de las marcas más reconocidas del mundo y uno de los grandes iconos del consumo, básicamente no crece. No es un secreto que Coca-Cola, igual que ocurre con su rival PepsiCola, navega contra corriente por la caída en las ventas de refrescos y bebidas azucaradas en todo el mundo, especialmente en EE UU y Europa por un cambio en los hábitos de consumo.