El caso del Boeing 777 de Malaysian Airlines que se estrelló este jueves en el este de Ucrania con 298 personas a bordo modificará por completo la seguridad aérea de los jefes de Estado, incluso cuando están en sus aeronaves a más de 10 kilómetros de altura. ¿Por qué? En este caso, según medios rusos, la intención era matar en el aire al presidente ruso Vladimir Putin.