El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha abandonado el lenguaje de las últimas jornadas y ha vuelto a la carga, a la defensa encendida de la ofensiva contra Gaza.La única planta de electricidad de la franja,está fuera de servicio tras un ataque israelí este martes, según fuentes de la autoridad energética del enclave palestino. Dos granadas de tanques israelíes golpearon uno de los tres depósitos de combustible en el complejo de la planta, lo que ha provocado un incendio. La explosión agravará los problemas de suministro energético a los 1,8 millones de habitantes de Gaza
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