La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha hecho ante la comisión de Defensa del Congresouna encendida defensa de «los 3.000 hombres y mujeres del CNI, del Estado de Derecho y de la Justicia». Ha sido una forma de abordar, aunque sin aportar datos, el asunto que en realidad centra la atención de los grupos parlamentarios: el presunto espionaje, mediante el programa Pegasus